Los sitios web que generan mayores visitas y mayores oportunidades de negocio, tienen una característica en común: contenidos de calidad.
Teniendo en cuenta que lo visual hoy domina nuestra vida, la creación efectiva de contenido debe apostar al uso de la imagen, fotografías y vídeo. El contenido perfecto genera mayores oportunidades de negocio.
Esto de “una imagen vale mil palabras”, es tan cierto que actualmente el uso de la fotografía y el vídeo se ha revalorizado, las redes sociales han colaborado para que esto suceda, pero también, ha sido el propio consumidor quien, a través de su participación en el canal social y en Internet en general, ha comenzado a demandar contenido visual como mecanismo de información, porque la imagen es ante todo inmediata, atractiva y descriptiva, en unos pocos segundos el internauta conocerá la información necesaria, sin tener que leer hasta el último punto y coma.
De todas maneras, esto no implica dejar de lado el lenguaje textual, todo lo contrario, implica ser más astutos al crear esa clase de contenido, ofreciéndole al lector el mismo beneficio de acceder al mayor caudal de información, de la manera más inmediata, atractiva y descriptivamente posible. Eso es lo que representa la creación de contenido de calidad y lo que desarrollaremos en cada uno de los puntos que siguen a continuación.
El contenido textual perfecto
El contenido textual es la base de la web de cualquier tipo de empresa, grande, mediana o pequeña, lo primero que cautivará al internauta será lo que el sitio ofrezca en calidad de contenido textual. Luego sí será momento de pensar en otras alternativas también interesantes. Pero para iniciar con la creación de contenido efectivo, es necesario comenzar elaborando textos perfectos.
Para crear el contenido textual perfecto, se debe tener en cuenta la estructura del mismo, obviando lo básico de introducción, desarrollo y conclusión, dado que el contenido al que hacemos referencia debe contar con características más avanzadas y por ello, su estructura debe garantizar el nivel de excelencia esperado.
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ESTRUCTURA DEL CONTENIDO: Objetivo de la creación del texto, audiencia objetivo, productos y servicios ofrecidos.
La estructura del contenido estará definida por los objetivos que impulsan la creación del texto, por el público a quien va dirigido el mensaje y por supuesto, por la descripción de los productos y servicios que comercializa la compañía.
Una vez que se ha definido todo ello, es momento de iniciar con la redacción del texto, en el que se deben tener en cuenta una serie de detalles.
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CARACTERÍSTICAS DEL CONTENIDO: Accesible, familiar, informativo, descriptivo e interesante.
Estas características podrían estar definiendo la personalidad de un individuo, pero en realidad, hablan del texto de una web, y ¿a qué se debe semejantes competencias en una simple redacción? Un texto carente de personalidad, difícilmente pueda atrapar al lector y si no lo hace, es prácticamente imposible que el sitio de la empresa en Internet, genere nuevos clientes. Siempre es útil contar con un modelo para realizar esta compleja tarea.
El contenido visual perfecto: Imágenes
La imagen puede serlo todo, o puede no ser nada, eso dependerá de la adecuada estrategia que esa fotografía compartida posea detrás de ella. Adaptado esto al entorno web y utilizado con fines comerciales para potenciar la imagen, productos y servicios de una compañía, el uso de la imagen puede convertirse en un potente recurso de captación de nuevos prospectos de clientes.
Al igual que en el caso del contenido textual, el contenido visual pensando en el formato fotográfico, requiere de una estructura clara que permita ponerle algo de orden a lo que deseamos ofrecer. Esa estructura también debe tener en cuenta el objetivo que persigue la empresa al utilizar esta clase de contenido, así como el público al que es dirigida la información y por supuesto, el tipo de productos y servicios comercializados por la organización y los beneficios que ofrece a sus usuarios. Una vez delimitado esto, es momento de poner manos a la obra.
¿La imagen puede incluir contenido textual?
Claro, fotografía y texto van de la mano, la infografía es un claro ejemplo de ello, el poder de sintetizar un potente mensaje a través de imágenes unidas por breves fragmentos de texto, resulta ser hoy un contenido extremadamente efectivo en el segmento web, potenciado además por la visibilidad obtenida, gracias al hecho de poder compartir esta clase de material en el canal social, atrayendo mayor viralidad para el sitio de la compañía.
¿Qué se debe tener en cuenta para crear contenido de calidad empleando la imagen como elemento protagonista?
Generar impacto es la principal razón por la que una empresa utilizará la imagen como parte de su estrategia de contenidos, por ello, este elemento debe cumplir con esa premisa, resultando cautivante para la audiencia.
La imagen empleada como contenido en un sitio web, debe ser informativa, descriptiva y principalmente atractiva a la mirada de los internautas, que concentre la atención del usuario de Internet y en lo posible, que deje alguna reflexión.
Para emplear la imagen dentro de la estrategia de contenidos, combinando el lenguaje visual y textual, es necesario pensar creativamente el mensaje que se quiere dar. Por ejemplo, en este caso, la imagen perfecta que acompañaría a este texto debería incluir a modo de breve listado, algunas de las características principales que el contenido de calidad posee, al mismo tiempo, ya que hablamos no sólo de contenido textual, sino además de contenido visual, podríamos incluir otra imagen que contenga un interesante titular que cautive la atención del lector, si nos basamos en la temática que estamos tratando, el titular que se vería perfecto en una imagen dentro de este material sería el siguiente: ¿Sabía usted que el cerebro humano puede procesar el contenido visual 60.000 veces más rápido que el contenido textual?.
El contenido animado
Si hablamos de generar tráfico en Internet, la tendencia que hoy manda es el contenido visual, dentro de esta clase de material, encontramos al vídeo como la opción más provechosa a tener en cuenta, puesto que en ella, quedan aunadas las estrategias más creativas al servicio de la información de calidad que el usuario necesita.
El surgimiento de YouTube como plataforma líder de vídeos, ha suscitado el interés de millones de personas en un formato que antes parecía exclusivo de la TV. Hoy, el vídeo ha ganado terreno gracias a que los usuarios pueden acceder a este formato no sólo como espectadores, sino también como hacedores.
Un vídeo es ante todo, contenido visual, como tal, al igual que la fotografía, si se comparte en la web de una compañía, debe generar cierto impacto en la información manejada por el lector, debe ser lo suficientemente interesante desde el primer momento, porque recordemos que no se puede obligar al internauta actual a estar durante largos minutos observando un vídeo dentro de una página. Por ello, el vídeo como recurso y como parte de la estrategia de contenido de una compañía, debe ser cautivante desde el primer segundo, debe lograr mantener el nivel de interés en el usuario, debe ser dinámico y accesible, además de estar presente en el número máximo de canales posible, porque si hay algo que ofrece el vídeo como contenido de una web, es viralidad para el sitio, por ello, compartirlo en los diferentes canales sociales es un recurso válido y casi obligatorio en los tiempos que corren.
Demás está decir que esta clase de material, al igual que ocurre en el caso de la imagen o el texto, debe aportarle algún valor a la experiencia del usuario dentro de la web en cuestión, por ello, debe ser informativo, brindarle utilidad al internauta, de manera que al terminar de verlo, deje algún tipo de enseñanza, además del llamado a la acción.
En el vídeo como contenido de la web de una compañía, se puede incluir fotografías, infografías y texto, pero sin dudas, será en el audio y en la propia grabación que se incluya, en donde residirá el mayor poder de atracción para el usuario.